¿Cuáles son las diferencias fiscales entre un 'bono' y una 'comisión'? - Conócelo aquí

En el caso de que te preguntes ¿Cuáles son las diferencias fiscales entre un 'bono' y una 'comisión'? - Conócelo aquí, leyendo la guía que hemos preparado al respecto. Ten en cuenta que todo esto se relaciona a las diferencias entre ‘salarios directos’ y ‘salarios indirectos’, pero enfocado en otro tipo de incentivos laborales.

Las comisiones y los bonos

Los bonos y comisiones suelen crear dudas entre empresarios y nuevos emprendedores, de hecho, muchas personas creen que son lo mismo. En cualquier caso, la realidad es distinta, pues las comisiones difieren en gran medida de los bonos (al menos en la mayoría de circunstancias). Por ello, si tienes dudas, lee atentamente la definición de cada uno de estos términos.

Comisión

Las comisiones son pagos realizados por las empresas por servicios o trabajos prestados. Es importante tener en cuenta que también son consideradas como comisiones los pagos a los trabajos realizados por parte de cooperativas o contratistas.

Usualmente este tipo de pagos se hacen acorde a la cantidad de ventas realizadas por un empleado. Es decir, los trabajos con base en comisiones, son más fructíferos con volúmenes mayores de trabajo.

Cabe resaltar que existen variantes con relación a las comisiones, de hecho, algunas empresas ofrecen trabajos con salarios bases y con comisiones especiales. Estas comisiones suelen representar un porcentaje establecido. Este tipo de comisión es común en los trabajadores de ventas.

Por ejemplo, supongamos que el encargado de un negocio aplica un porcentaje de comisión con cada venta que realizan los trabajadores. Si dicha comisión se establece en el 5%, esto significa que, por cada venta realizada, el trabajador obtendrá una comisión, pero claramente para llevar este tipo de sistema, es necesario conocer la importancia de las hojas de balance en un negocio, llevando adecuadamente los gastos y pagos.

Bonos

Las empresas proporcionan este tipo de pagos como premios a los empleados por un rendimiento destacable. Usualmente los bonos son ajenos a los salarios y no siempre están estipulados en la normativa o legalidad. Este pago nace de la voluntad de los dueños o encargados de los empleados, siendo parte de los tipos de planes de incentivos laborales.

Sin dudas, los bonos suelen ser incentivos que ayudan a establecer un ambiente de bienestar a los empleados. De hecho, un buen bono, suele aumentar el rendimiento de los empleados, ya que los empleados sienten que su trabajo tiene un valor especial y es apreciado.

Existen muchas variantes de bonos, de hecho, si bien muchos son monetarios, otros suelen presentarse a modo de regalos u objetos. De hecho, algunas empresas tienen tradiciones en las que realizan obsequios a sus empleados luego de años de servicio.

También se habla de los bonos por productividad, que representan incentivos que se pagan usualmente al llegar a cierta cantidad de ventas u objetivos. Este tipo de bonos se ofrecen a los trabajadores al alcanzar metas y son efectivamente otorgados como premios.

Diferencias fiscales entre los 'bonos' y las 'comisiones'

Todo buen gestor que conozca los principales objetivos en la gestión de los recursos humanos, sabe que la diferencia más importante a nivel fiscal entre un bono y una comisión, es que las comisiones al ser pagos, pasan directamente por los procesos fiscales. En otras palabras, las empresas tienen en cuenta los diversos impuestos establecidos por la ley al momento de pagar comisiones.

Por otra parte, los bonos, cuando nacen propiamente por la voluntad de los empleadores no deben pasar por este proceso. Claro, existen excepciones, pues algunas veces “bonos fijos” entran en los diversos balances que lleva una empresa y por ende también caen en los pagos de impuestos o deberes fiscales de estas características.